Los ciudadanos alemanes mostraron extraordinaria audacia e imaginación en sus esfuerzos por superar el Muro de Berlín y escapar de Alemania Oriental.
Más de 40.000 personas logradon hacerlo.
El museo dedicado a la historia del Muro, situado en el punto más famoso cruce entre el Este y el Oeste, es un testimonio de estas hazañas a veces casi increíbles.
Los vehículos eran de uso frecuente, como un viejo Volkswagen "escarabajo" en la exposición, su tanque de combustible fue modificado para permitir que alguien totalmente encorvado y doblado se escondiera dentro.
Alrededor de 300 personas escaparon por este medio, bajo el asiento de atrás, en un piso falso o incluso atado debajo del vehículo. Esto significaba tener que soportar la incomodidad extrema durante horas y horas, sin una tos o un estornudo que podría alertar a los guardias fronterizos de Alemania del Este.
A medida que el Volkspolizei la policía alemana descubrió esos escondites, tuvieron que ir cambiando, una mujer artista de Magdeburgo se escondió en la caja del altavoz de un cantante de visita holandesa, un francés ocultó su novia dentro de una maleta grande.
Las paredes del museo están cubiertas con fotos de las personas dispuestas a correr riesgos para reunirse con los demás de nuevo.
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