Tenía 4 puertas, los 2 delanteras con bisagras posteriores, de manera que todas tenían los goznes en el mismo pilar, en la parte delantera había 2 ganchos de remolque y 2 faros montados en el guardabarros, en el capó había una pala, luz de emergencia y una rueda de repuesto, el capó no de podía abrir y no había espacio para el equipaje, solo un depósito de reserva de combustible de 5 galones, que se llanaba a través de un orificio situado encima del pedal de embrague. El deposito normal se llenaba desde detrás de la rueda de recambio.
Dada la extensa variedad de trabajos de la vida militar, hubo varias versiones como grúa, camionetas de reparto, quitanieves, un modelo especialmente preparado para circular sobre los railes del tren e incluso 6 prototipos con tracción a las 4 ruedas.
Los Kübelwagen fueron tan populares entre las tropas aliadas, que la proporción de intercambio era de un Kübelwagen por dos jeeps.
Se cuenta que se envió a Inglaterra un vehículo capturado, y al ser desmantelado para inspeccionarlo, se encontraron casi 50 kilos de arena en el armazón de su carrocería, a pesar de ello, el coche seguía funcionando.
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